martes, 24 de agosto de 2010

A la memoria de Félix Arias Ayala

Regresando de un viaje de trabajo quedé sorprendido por la triste noticia del fallecimiento de mi amigo y colega Félix Arias Ayala.

Con "Mandela", como le decíamos en el ámbito periodístico, trabajamos juntos durante algunos años en Radio Centenario "La Nueva". Tiempo suficiente para conocer de su sencillez y su gran deseo de superación.

Estudiamos comunicación en la misma universidad, aunque no fuimos compañeros de curso. Recuerdo que en una época trabajó gratis en un periódico solo con el afán de aprender. Posteriormente su esfuerzo fue premiado con la incorporación a la planta de periodistas de ese medio y de ahí en más su gentileza y amor por la profesión le abrieron otras puertas.

En los últimos años la diabetes y una deficiencia renal (con trasplante incluido) hicieron mella en su cuerpo, pero no en su carácter.

Lamenté mucho no haber tenido la posibilidad de estar presente en su funeral, pero hoy hago una oración porque Dios consuele y sostenga a su esposa e hijos. Sé que él mora en paz por la eternidad.